Aunque el gobierno de Indonesia se apresuró a declarar la emergencia nacional por el virus COVID 19 el 29 de febrero, las respuestas oficiales se han llevado a cabo en gran medida a nivel provincial. Las cifras oficiales están aumentando, con casos notificados en muchas regiones.
Los gobernadores de Java Occidental y Central han introducido el distanciamiento social y ordenado el cierre de fábricas de confección en algunos distritos por motivos de salud. La mayoría de las fábricas de Better Work, sin embargo, siguen funcionando, pero muchas informan de pedidos cancelados y pendientes de envío por parte de los compradores. Esto está provocando problemas de liquidez y preocupación por su capacidad para hacer frente al pago de los salarios.
Un acontecimiento clave en la respuesta del gobierno fue la publicación de una circular del Ministerio de Trabajo el 17 de marzo. La circular ofrece consejos para minimizar el impacto de la COVID 19 en los lugares de trabajo, entre ellos dar prioridad a la SST en el lugar de trabajo y al distanciamiento social. También recomendaba el pago íntegro de los salarios de los trabajadores aislados o en cuarentena a causa de la enfermedad.
En los casos de cierre de fábricas por cancelación y aplazamiento de pedidos, el gobierno recomienda que sindicatos y empresas entablen negociaciones sobre el mantenimiento de los salarios y otras cuestiones.
El Gobierno indonesio está estudiando la posibilidad de conceder estímulos específicos o ayudas financieras al sector, pero aún no lo ha hecho.
Better Work apoya a las fábricas y el diálogo social.
Los servicios básicos de Better Work se han pospuesto hasta finales de marzo, y probablemente hasta abril. Los asesores empresariales mantienen un contacto regular con sus fábricas mediante llamadas telefónicas y están intensificando las visitas virtuales de asesoramiento, utilizando un modelo que está funcionando con éxito en Camboya. A mediados de abril está previsto celebrar un seminario industrial virtual (formación).
La ICM ayuda a las fábricas a aplicar las principales recomendaciones en materia de SST. Está elaborando guías en forma de respuestas a las preguntas más frecuentes sobre SST y cuestiones laborales, y compartiendo ejemplos de buenas prácticas. Se ha puesto en marcha un plan de acción paso a paso para que las fábricas informen y protejan a los trabajadores utilizando los últimos consejos de la OIT y la OMS sobre distanciamiento social, lavado de manos y otras medidas. A través de las redes sociales se distribuyó un breve vídeo sobre buenas prácticas en las fábricas. Posteriormente, muchas fábricas han instituido controles de temperatura, nuevos regímenes de lavado de manos y han distribuido mascarillas a los trabajadores.
La necesidad de un diálogo social constructivo está resultando crucial en la crisis, ya que cada vez son más las fábricas que reducen o suspenden su actividad. Better Work está en contacto con los gobiernos provinciales y nacionales para aclarar la política sobre cuestiones clave, en particular el mecanismo de negociación salarial en las fábricas afectadas. El programa también asesora a los gobiernos sobre cuestiones de protección social, y los pone al día con las últimas recomendaciones de la OIT e información sobre cómo los países vecinos, como Singapur y Filipinas, están haciendo frente a la pandemia.
Better Work Indonesia también está trabajando con las asociaciones nacionales de empresarios APINDO y API y con los sindicatos, tanto para evaluar su respuesta inmediata como para estudiar cuestiones a medio plazo sobre cómo gestionar la protección salarial en casos de empresas en dificultades.