21 de abril de 2016.
Ammán (Noticias de la OIT) - El Ministerio de Trabajo de Jordania, las principales asociaciones de empleadores de la confección y el sindicato de la confección del país acordaron el jueves (21 de abril de 2016) en Ammán modificaciones al contrato unificado para los trabajadores migrantes en el sector de la confección de Jordania, permitiendo la inclusión de refugiados sirios en la fuerza laboral del Reino.
Tras la conferencia Supporting Syria and the Region celebrada en febrero en Londres, Jordania creará puestos de trabajo para los refugiados sirios en las zonas industriales cualificadas del país. Tras la apertura del mercado de la UE con normas de origen simplificadas, Jordania se beneficiará de nuevas inversiones, que también contribuirán a impulsar el empleo local.
El Ministerio de Trabajo jordano expedirá dos mil permisos de trabajo exentos de tasas a refugiados sirios, gracias a la cooperación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y las partes interesadas locales. Esto permitirá a la nueva mano de obra incorporarse al próspero sector de la confección, que representa el 17% de las exportaciones del país.
Dan Rees, Director de Better Work -una asociación entre la OIT y la Corporación Financiera Internacional del Grupo del Banco Mundial- explicó que el reto de emplear tanto a jordanos como a sirios constituía una prioridad absoluta para el Gobierno de Jordania, y que el programa estaba dispuesto a ayudar.
"Estamos estudiando una serie de estrategias para crear empleo tanto para sirios como para jordanos y explorando cómo Better Work puede ser relevante en este debate, dada nuestra experiencia de que los empleos de calidad atraen la inversión. Estamos dispuestos a contribuir a la expansión del sector", declaró Rees.
Agradeciendo los esfuerzos de todas las partes, Abdallah al Jbour, Director de Inspección Laboral del Ministerio de Trabajo jordano, admitió que este cambio exigía un gran esfuerzo por parte de la industria de la confección jordana. "Estamos intentando identificar a una serie de sirios interesados en trabajar en el sector y hablando con las fábricas para que expidan los permisos de trabajo", declaró.
Anna Gaunt, Directora del Proyecto de Permisos de Trabajo del ACNUR, declaró que su agencia estaba encantada de haber alcanzado un acuerdo común que tiene en cuenta la necesidad de proteger a los refugiados y garantizar que se respetarán sus derechos laborales. "Espero que podamos ampliar este proyecto piloto en el futuro", añadió.
El contrato unificado negociado por la OIT y Better Work ha resultado ser un hito en el mercado laboral jordano, ya que aborda el problema de que algunos trabajadores migrantes del sector de la confección firmen varios contratos en su país de origen y luego firmen otros diferentes al llegar a Jordania. El nuevo contrato también desglosa claramente los detalles relativos a sus condiciones de empleo y tiene en cuenta la condición de refugiados de los sirios.
Fathallah al Omrani, Presidente del Sindicato General de Trabajadores de las Industrias Textil, de la Confección y del Vestido, declaró que, para animar a los empresarios a contratar sirios, hay que proporcionar ayuda para sufragar el transporte y la formación de la nueva mano de obra.
Dina Khayyat, Presidenta de la Asociación Jordana de Exportadores de Prendas de Vestir, Accesorios y Textiles (JGATE), afirmó que este contrato unificado se aplicará en todas las fábricas y no se quedará sólo "sobre el papel".
"Me gustaría que el contrato unificado se aplicara también en otros sectores. Esperamos que no sólo se incorporen 2.000 trabajadores sirios, sino muchos más, así como más jordanos", añadió Khayyat.
Tracy Hart, Especialista Principal en Medio Ambiente del Banco Mundial, declaró que tanto su institución como su brazo inversor en el sector privado, la Corporación Financiera Internacional, estaban gratamente sorprendidas por la rapidez con que se ha materializado este contrato unificado para los sirios.
"Es un testimonio de la estrecha y productiva colaboración entre el sindicato, la JGATE, los representantes del Gobierno de Jordania y la OIT", afirmó.
El sector de la confección jordano, que disfruta de un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos, sigue prosperando a pesar de la volatilidad en la región, y sus exportaciones pasaron de 700 millones de dólares en 2007 a más de 1.500 millones en 2015. El sector emplea a unos 40.000 trabajadores migrantes, la mayoría procedentes de Bangladesh, Sri Lanka e India.