Mientras Better Work Viet Nam reflexiona sobre un legado de colaboración con los interlocutores sociales de la industria de la confección, consideramos los hitos clave y miramos hacia el futuro.
En 2009, Vietnam se estaba convirtiendo en un actor clave de la industria mundial de la confección, un sector que contribuía significativamente al crecimiento económico del país y daba trabajo a más de dos millones de personas, en su mayoría mujeres jóvenes de zonas rurales. Con el telón de fondo de la transición de una economía de planificación centralizada a una economía de mercado y la entrada de Vietnam en la Organización Mundial del Comercio en 2007, el sector de la confección se convirtió en la principal fuente de ingresos por exportaciones del país. Sin embargo, este rápido crecimiento vino acompañado de retos, como el aumento de la competencia, la presión para reducir los costes y el riesgo de explotación de los trabajadores.
El Ministerio de Trabajo, Invalidez y Asuntos Sociales de Vietnam (MoLISA), junto con la Cámara de Comercio e Industria de Vietnam (VCCI) y la Confederación General del Trabajo de Vietnam (VGCL), buscaron la colaboración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Corporación Financiera Internacional (CFI) del Grupo del Banco Mundial para establecer un Programa Better Work. La experiencia de Better Work, ya bien asentada en la vecina Camboya, se trasladó al país para ayudar a adaptar la legislación nacional a las normas internacionales. Desde entonces, Better Work Viet Nam (BWV), con el apoyo de sus socios para el desarrollo, ha trabajado con las partes interesadas nacionales para mejorar las condiciones laborales y la competitividad de las industrias de la confección y el calzado.
En el horizonte
Ahora que Better Work Viet Nam cumple 15 años de innovación, sus valiosas asociaciones con los trabajadores, el gobierno y las empresas siguen mejorando los lugares de trabajo, los medios de subsistencia y las vidas en esta industria crucial. A través de su compromiso a varios niveles -trabajando a escala empresarial, nacional y mundial-, Better Work Viet Nam ha apoyado a la industria a través de crisis mundiales, cambios políticos y la introducción de nuevas tecnologías. Al desarrollar la capacidad de los socios tripartitos y colaborar con otros proyectos de la OIT, el programa también ha generado efectos indirectos en otros sectores de la economía, como la electrónica.
La industria de la confección es ferozmente competitiva. Mantener su trayectoria de aumento de la cuota de mercado y de la productividad exigirá que la industria siga centrándose en los elementos básicos del cumplimiento, al tiempo que se adapta a los nuevos retos de la sostenibilidad medioambiental, la transformación digital y la automatización. Con su enfoque multicapa, Better Work Viet Nam seguirá defendiendo y reforzando la capacidad de las partes interesadas para gestionar el cambio, garantizando que las normas laborales sigan el ritmo del crecimiento económico y creando una industria más resistente y competitiva.